En medio de un brote de violencia para celebrar el Día de la Militancia en el anexo de Diputados, la Presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales, la peronista disidente Graciela Camaño al acomodar con un cachetazo de derecha que impactó sobre la mandíbula del diputado oficialista Carlos Kunkel, (éste sin revancha quién solo atinó a reírse de la insólita reacción), al intentar diferir la firma de dictámenes por 24 horas por denuncias, produjo la virtual clausura del período ordinario de sesiones en la Cámara de Diputados, después de coronar una jornada de denuncias cruzadas sobre supuestos sobornos para aprobar el presupuesto 2011.
El mismo día, ante el fracaso por la falta de quórun de 140 ausentes por 117 en el Parlamento para la aprobación del presupuesto, el Gobierno dejará de polemizar sobre el tema al tener preparado su próxima jugada.
El primer día hábil, el 3 de enero de 2011 se publicará en el boletin oficial un decreto (no DNU) en el que el Ejecutivo reglamentará la prórroga del presupuesto vigente con la autoridad que le otorga el artículo 27 de la Ley 24.156 de Administración Financiera aprobada por Menem en septiembre de1992.
Desde ése mismo día aparecerán en el Boletín oficial múltiples decretos y reglamentaciones que firmará CFK y su gabinete donde se aplicarán los actos administrativos públicos durante el año.
Las normas serán revisadas por el Jefe de Gabinete Anibal Fernández que sabe que tendrá que trabajar a destajo en el verano, por lo que se le multiplicarán las normas a firmar en su despacho. "Me voy a lustrar mi traste durante todos los días de 2011 firmando decretos, pero cada uno va a ser un orgasmo" expresó Fernández a sus colaboradores al saber que no tendrá presupuesto aprobado por el Legislativo.
El espíritu que reinaba en La Rosada poblada de funcionarios, es que desde enero el Ejecutivo se permitirá la licencia de disponer libremente de las partidas presupuestarias vigentes del 2010 más la que discrecionalmente vayan apareciendo durante el próximo año, continuando con el ritmo actual de crecimiento del 9% en la economía, y al contar con 50 mil millones de reservas con lo que se supone que llegarán a los 80 mil millones que la recaudación de la soja aportaría, si continúa su ritmo ascendente con la recaudación del IVA al 30%. Todo ése dinero al no tener partidas asignadas se usará a criterio del Gobierno como una "gracia" de recurso favorable en un año electoral.
Alguien de fuente oficial con aire vengativo dijo: "Ellos se lo buscaron al no aprobar el presupuesto".
Según los analistas los movimientos fiscales que aplicará el Ejecutivo por vía del decreto Ley 24.156 de Administración Financiera y Control del Sector Público Nacional, el artículo 27 de dicha norma menciona; si al inicio del ejercicio financiero no se encuentra aprobado el Presupuesto, regirá el que tuvo vigencia el año anterior con ajustes que introduzca el Poder Ejecutivo, y será decisión del Gobierno los aumentos de partida que tendrá cada provincia o municipio con respecto a ése año, el dinero a ser girado al Poder Judicial, Legislativo y a los organismos desentralizados y a cada ministerio público.
También será potestad de CFK resolver por el dinero que corresponda por aumentos salariales al sector público y ayuda a las provincias en ése mismo item, y son los 3 items por el cuál el Gobierno deberá moverse con cautela; nuevas obras públicas, pago de deuda con reservas y el eventual acuerdo con el Club de Paris.
Para el caso de obras públicas que tuvieren asignadas las partidas continuarán ejecutándose, para las obras nuevas que comiencen deberán recurrir al Congreso para aprobar su proyecto, y se supone que debería ser apoyada por los legisladores de sus provincias. Más complicado es el pago de deuda con reservas por lo cuál el Gobierno intentará enviar al Congreso un proyecto de ley en marzo para conseguir apoyo, si fracasa avalaría legalmente un DNU. Para el acuerdo con el Club de Paris el Gobierno necesita el apoyo de una ley que debería ser aprobada por el Congreso en abril pero la oposición estaría abocada al debate de alto nivel por un acuerdo, ante un previsible temor respecto al potencial teñido de electoralismo.
Se anticipa un panorama desalentador para los partidos y la oposición pagando un costo considerable al considerar que el presupuesto es una trampa para distribuir fondos, con facultades a De Vido para nuevas obras.
Los argumentos son violatorios a la Constitución que no se apruebe un presupuesto 2011 para que la oposición lo debate y el oficialismo acepte los cambios en el reparto para todas las provincias por igual, así se provocan las divisiones en los bloques con amenaza de perder posición en el recinto, y miran a la Rosada esperando señales oficialistas donde las posiciones dentro del peronismo se desdibujan cada vez más y la fuerte convulsión que sacude, al radicalismo y al peronismo disidente, divididos entre quienes pugnan por moderar sus ataques al Gobierno y tender puentes de diálogo y quienes insisten en plantarse como oposición firme.
Las heridas están lacerantes: Elisa Carrió, con sus acusaciones, se distanció, casi definitivamente, de sus otrora socios del Acuerdo Cívico y Social. Además, se ganó el encono del peronismo disidente, Pro y de la centroizquierda cuando los acusó de no acompañarla en sus denuncias sobre los supuestos favores que ofreció el Gobierno a una docena de diputados opositores para facilitar la aprobación del presupuesto 2011.
Pese a que la líder de la Coalición Cívica vislumbra que, se recompondrá la unidad opositora, el resto de los referentes no kirchneristas no son tan optimistas y vislumbran un rotundo cambio en el escenario de las próximas relaciones parlamentarias.
Los argumentos son violatorios a la Constitución que no se apruebe un presupuesto 2011 para que la oposición lo debate y el oficialismo acepte los cambios en el reparto para todas las provincias por igual, así se provocan las divisiones en los bloques con amenaza de perder posición en el recinto, y miran a la Rosada esperando señales oficialistas donde las posiciones dentro del peronismo se desdibujan cada vez más y la fuerte convulsión que sacude, al radicalismo y al peronismo disidente, divididos entre quienes pugnan por moderar sus ataques al Gobierno y tender puentes de diálogo y quienes insisten en plantarse como oposición firme.
Las heridas están lacerantes: Elisa Carrió, con sus acusaciones, se distanció, casi definitivamente, de sus otrora socios del Acuerdo Cívico y Social. Además, se ganó el encono del peronismo disidente, Pro y de la centroizquierda cuando los acusó de no acompañarla en sus denuncias sobre los supuestos favores que ofreció el Gobierno a una docena de diputados opositores para facilitar la aprobación del presupuesto 2011.
Pese a que la líder de la Coalición Cívica vislumbra que, se recompondrá la unidad opositora, el resto de los referentes no kirchneristas no son tan optimistas y vislumbran un rotundo cambio en el escenario de las próximas relaciones parlamentarias.
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