Cruje la caja del ANSES de los jubilados ...

Los fondos del ANSES son los más preciados para K, que permitieron llevar adelante los programas sociales y la asignación por hijo y compras de PC escolares, la construcción de viviendas y financiamientos bancarios a bajo interés.
Desde la estatización de los ahorros públicos que administraron las AFJP, la Anses terminó convirtiéndose en un banco del oficialismo de recursos ventajosos para Kirchner, que comenzó a codiciar y condicionar los depósitos de las entidades como regulador del sistema financiero.
Por su parte los líderes provinciales que advirtieron ésta estrategia del Anses quisieron aprovecharla para pasar del sistema de reparto a la capitalización del sistema previsional usando sus recursos, al recibir el 15% de los recursos coparticipables. Así una vez recibida la suma de dinero de Anses, el resto se reparte entre la Nación y las provincias.
Kirchner eligió manejar la "caja" desde que era gobernador en su provincia y operaba de verdugo. Hoy las cosas han cambiado y en noviembre del 2008 ,Cristina reestatizó el sistema con 27 millones por año como desembolsos que reciben las provincias pero el déficit de ellas es mayor y no les alcanza.
Ya no se trata de retener fondos, sino la fòrmula es bajar los gastos arbitrarios en el Estado, pero ésto no ocurre por un capricho gubernamental ya que para mantener obediencia politicas y rendimiento electoral junto al clientelismo, la Anses otorga recursos para promocionar los fideicomisos y asì la rueda puede seguir girando a favor del gobierno.
Ante ésto nadie se atreve criticar ni tampoco la oposición a exigir devoluciones de fondos por temor a los gobernadores ser denunciados por querer quedarse con la plata de los jubilados.
Ésto supone por parte de los gobernadores advertir que no desean que se desfinancie al Anses, pero ante una campaña electoal todo vale. Durante la campaña K es cauteloso saber del riesgo de imágen negativa que supone tener y hacer notar que en el Banco Central, Mercedes del Pont que llegó como la heroína para administrar los recursos del Fondo de Desendeudamiento, ya no tiene ese glamuroso apoyo de otrora cuando la Casa Rosada le brindaba.
En algún momento la emergencia financiera o económica del Estado se volverá a echar mano por los designios polìticos a las reservas del Anses para usar nuevamente en las elecciones del 2011, al no tener previsto la inflacón en su agenda gubernamental.
El mandato de Marco terminará en septiembre y no sería renovado lo cuál quedaría el cargo a la fideligna kirchnerista Gabriela Ciganotto y a un pequeño directorio con otras vacantes que tampoco se cubrirían lo que permitiría al Central un manejo discrecional oficial sin monetaristas de por medio que presionen,facilitando así un mejor manejo del mercado financiero, pero siempre exste la posibilidad de cambios por factores exógenos.
Entonces vale la pena recordar que el gobierno argentino le debe a ItaIia más de cuatro mil ochocientos millones de dólares a los jubilados, y lejos de dejar de ser historia pasada no quedará en el olvido la disputa que se encuntra bajo el estudio de la CIADI, el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones del Banco Mundial y del grupo que el mismo país generó, y originalmente en los otros países del G-20 como Italia.
Desconcierta ésto al tratarse de un país industrializado con relativa riqueza, miembro del G-20 propusiera semejante oferta a los tenedores de bonos durante la administración de K pagar 27 centavos por dólar, cuándo los países subdesarrollados más pobres que entran en default generalmente ofrecen de 45 a 50 centavos por dólar a sus acreedores.
Las acciones tomadas por la Argentina se enfrentan con las normas del capital internacional como un abuso intencional del sistema financiero mundial y se hace difícil mantener el status como miembro del G-20 a la Argentina, y se ha recusado en varias oportunidades y persiste en continuar manifestándolo.
Ante tal situación Argentina tiene el riesgo de fracasar para mejorar sus relaciones con los bonistas y la política financiera europea puede endurecerse con la política de CFK, y echar al país del G-20 por no conllevar privilegios que no merece, al incumplir el pago de su deuda.
La visita del ministro de Economía Boudou no sucitó atracción por inversiones extranjeras a pesar de estar alejado durante una década, por considerar el plan propuesto por el ministro de un regalo de los tiempos de crisis y no una realidad a los 180.000 bonistas pequeños disconformes porqué no consiguen llegar a la meta del 60%.
Argentina al no compartir los mismos intereses ni objetivos busca subvertir los propósitos de manera incondicional é intencional de reestructurar su pasivo.